El Índice de Precios de Consumo (IPC) en España experimentó un incremento del 0,1% durante el mes de enero con respecto al mes anterior, lo que resultó en un aumento de tres décimas en su tasa interanual, llegando al 3,4%. Este incremento en la inflación se debió principalmente a la subida en el costo de la electricidad.
Por otro lado, los precios de los carburantes registraron una disminución durante enero. Después de dos meses consecutivos de caídas, la inflación vuelve a mostrar un incremento, ubicándose en su nivel más alto desde octubre.
Sin embargo, la inflación subyacente, que excluye alimentos y productos energéticos, disminuyó dos décimas durante el mes de enero, aunque aún se mantuvo en un 3,6%, dos décimas por encima del IPC general.
En relación a esto, el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, afirmó que la inflación se mantiene controlada alrededor del 3% y que la inflación subyacente sigue moderándose.
En términos mensuales, el IPC experimentó un aumento de una décima en enero, mientras que el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) registró una tasa interanual del 3,5%, dos décimas más que el mes anterior.
Por último, la nueva estructura de ponderaciones del IPC para 2024 presenta cambios significativos en los grupos de mayor peso, con el ocio y la cultura ganando importancia y la vivienda perdiendo peso significativamente. Estos cambios reflejan las variaciones en los hábitos de consumo de la población.
En conclusión, la inflación en España experimentó un ligero incremento durante el mes de enero, principalmente debido al encarecimiento de la electricidad. Aunque la inflación subyacente disminuyó ligeramente, aún se mantiene por encima del IPC general. El gobierno asegura que la inflación se encuentra controlada y que la estructura del IPC refleja cambios en los patrones de consumo de la población.
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