Este sábado llega a su fin la emocionante propuesta de danza del Festival de las Murallas de Pamplona, una doble exposición que ha cautivado a los espectadores con sus intensas y variadas actuaciones. La primera parte del festival ha incluido cuatro impactantes presentaciones, cada una con una duración de 15 minutos.
Una de las coreógrafas destacadas ha sido Cristina Hall, quien ha presentado su impresionante creación «Simbiosis». Su habilidad y destreza en el arte de la danza han dejado al público con la boca abierta, mostrando una técnica excepcional y una pasión palpable.
Por otro lado, Pieri Margherita ha realizado una exaltación de la mímica y la onomatopeya en su coreografía «Il Rossignuolo». Cada movimiento suyo ha sido una auténtica obra de arte, transmitiendo emociones y contando historias sin pronunciar una sola palabra.
La compañía de danza italiana Compagnia Bellanda Ets también ha dejado su huella en este festival, presentando un movimiento híbrido que fusiona diferentes estilos de danza. Su actuación ha sido una mezcla de elegancia y fuerza, dejando al público maravillado con su talento y versatilidad.
Desde Marruecos, llega Kiki House of Anunnaki con su espectáculo «Ceremonia Anunnaki». Esta impresionante actuación ha sido una verdadera fiesta para los sentidos, con una combinación única de música, danza y vestuarios deslumbrantes. Los espectadores han sido transportados a un mundo mágico y misterioso durante esta cautivadora presentación.
Para guiar a los espectadores durante todas estas actuaciones, jóvenes practicantes de Parkour han asumido el rol de guías. Con su agilidad y dominio del espacio, han sido los compañeros perfectos para acompañar a los asistentes en esta aventura danzante.
En la segunda parte del festival, Zaratiegi ha dado inicio a la sesión de «Malditos Night» con su espectáculo «Zaratton. Live». Su música y su presencia escénica han sido impresionantes, creando una atmósfera vibrante y eléctrica que ha hecho vibrar a todos los presentes.
David Ballano ha sido el responsable de la música y el hilo conductor de todas las actuaciones restantes, presentando IDM (Intelligent Dance Music). Su estilo único ha sido el complemento perfecto para cada actuación, aportando un toque de innovación y experimentalismo a la experiencia.
El Festival de las Murallas de Pamplona ha sido una celebración inolvidable de la danza y la música, brindando una experiencia única a todos los asistentes. Con su variedad de propuestas, ha logrado entretener e inspirar a la audiencia, consolidándose como un evento imperdible en el calendario cultural de la ciudad.
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