Junts ha votado en contra de la proposición de ley de Amnistía en el Congreso de los Diputados. La ley, que buscaba otorgar amnistía a los líderes independentistas catalanes encarcelados, será devuelta a la Comisión de Justicia para ser renegociada.
La decisión de Junts de votar en contra de la ley parece haber sido estratégica, ya que han ganado tiempo para seguir presionando al Gobierno a hacer más concesiones en favor del independentismo catalán. Durante toda la mañana, los diputados de Junts han estado presionando al PSOE para que apoyen sus enmiendas.
La negativa de Junts a apoyar la ley se produjo después de que todas sus enmiendas fueran rechazadas. El líder del Partido Popular (PP), principal partido de la oposición, ha criticado al PSOE por pactar con los independentistas y calificó la proposición de ley de amnistía como una «infamia».
La portavoz de Junts, por su parte, ha desafiado a los socialistas y ha acusado a la cúpula judicial de prevaricación. En el debate, los aliados del Gobierno instaron a Junts a aprovechar la oportunidad de impulsar la ley. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha defendido que los jueces están inventando delitos.
El PSOE, partido en el Gobierno, ha defendido la bondad de la ley de amnistía, argumentando que busca garantizar la convivencia. Podemos, uno de los socios de coalición del PSOE, ha acusado a los jueces de esquivar la ley. EH Bildu, otro de los partidos independentistas vascos, ha acusado a los jueces de actuar de manera coordinada y organizada.
Por su parte, el Partido Nacionalista Vasco (PNV) ha defendido que la amnistía mejorará la convivencia y la paz social. El partido político de izquierda, Sumar, ha atacado el «capitalismo de amiguetes» de la derecha. Vox, el partido de extrema derecha, ha afirmado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está condenado a ser chantajeado permanentemente.
La votación y el debate sobre la ley de amnistía han evidenciado las tensiones y confrontaciones entre los diferentes partidos políticos en España, especialmente en relación con el conflicto catalán. El futuro de esta ley y su impacto en la estabilidad del país aún es incierto. La propuesta ha generado controversias y ha mostrado las diferentes posturas y visiones políticas existentes en el panorama español.