Kim Jong-un, líder de Corea del Norte, ha llegado a Rusia para reunirse con el presidente ruso, Vladímir Putin, en un intento por fortalecer las relaciones bilaterales entre ambos países. La reunión se llevará a cabo en el extremo oriental de Rusia y coincidirá con la participación de Putin en el Foro Económico Oriental que se celebra en la ciudad de Vladivostok.
Se espera que la reunión tenga lugar durante la tarde del martes y no se realizará una rueda de prensa. Esta visita marca la primera vez que Kim viaja fuera de su país desde el inicio de la pandemia de coronavirus y su primera visita a Rusia en casi cuatro años y medio.
La visita de Kim a Rusia busca fortalecer las relaciones con el país vecino en un momento en que Corea del Sur, Estados Unidos y Japón están fortaleciendo su cooperación en materia de seguridad y defensa. Estados Unidos ha expresado su preocupación por esta reunión, afirmando que Rusia busca firmar un acuerdo de suministro de armas que le permita acceder a material restringido por las sanciones internacionales impuestas debido a la invasión de Ucrania.
El New York Times informó que Putin estaría interesado en comprar artillería y misiles antitanque a Corea del Norte, mientras que Kim buscaría tecnología y ayuda alimentaria a cambio. Es posible que el suministro de ayuda humanitaria sea uno de los temas que se aborden durante la reunión.
Kim viajó en tren desde Pyongyang y cruzó el Puente de la Amistad del Río Tuman para llegar a Rusia. Le acompañan los ministros de Exteriores y Defensa, así como altos representantes militares y funcionarios relacionados con el programa espacial norcoreano. Aún no se sabe si se han realizado modificaciones en el tren para poder circular por las vías férreas de Rusia.
Este encuentro entre Kim y Putin tiene como objetivo fortalecer la relación bilateral entre Corea del Norte y Rusia en un momento de cambios en las alianzas regionales y tensiones internacionales.