El jugador israelí Shon Weissman no viajará a Pamplona para el partido entre Osasuna y Granada. El delantero pretendía jugar a pesar del conflicto en Oriente Medio, pero el club decidió que no lo hiciera por razones de seguridad. El entrenador del Granada, Paco López, ha declarado que Weissman está afectado por la situación y que el fútbol ha sido una válvula de escape durante los entrenamientos.
La polémica en torno a Weissman ha aumentado luego de que fuera denunciado ante la Fiscalía por un mensaje agresivo en las redes sociales relacionado con los eventos en su país. Ciudadanos granadinos y palestinos presentaron una denuncia por posible delito de odio, lo cual ha puesto en jaque al jugador israelí.
Además, los seguidores del Osasuna han estado promoviendo un recibimiento hostil para Weissman. Esto ha generado preocupación en el club y ha sido otro motivo para que se decida dejar al jugador fuera del encuentro. La seguridad de Weissman y de los demás jugadores es una prioridad para el equipo.
El conflicto en Oriente Medio ha generado tensiones no solo en lo político, sino también en el ámbito deportivo. Muchos jugadores y clubes han manifestado su apoyo a Palestina, mientras que otros han defendido a Israel. Esta situación ha llevado a que algunos futbolistas sean señalados y actitudes como la de Weissman sean objeto de controversia.
Por ahora, queda pendiente ver cómo se resolverá esta situación y cuál será el futuro de Weissman en el equipo. Lo que es seguro es que su ausencia en el partido contra el Osasuna es una muestra palpable de cómo el conflicto en Oriente Medio ha afectado al fútbol y sus protagonistas.
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