El sindicato automovilístico United Auto Workers (UAW) ha decidido ampliar la huelga en 38 centros de trabajo de General Motors (GM) y Stellantis. El presidente del sindicato, Shawn Fain, ha advertido que están dispuestos a declarar nuevos parones en otras instalaciones del sector si las negociaciones no avanzan.
Esta medida ha sido considerada «innecesaria» por parte de General Motors, quien ha acusado a UAW de manipular el proceso de negociación. Sin embargo, la Casa Blanca ha pedido al sector mantener el diálogo hasta lograr un acuerdo mutuamente beneficioso.
UAW se ha centrado en las negociaciones con GM y Stellantis debido a la falta de seriedad y rechazo a las ofertas presentadas por el sindicato. Por su parte, Ford ha logrado avanzar en las negociaciones y ha acordado eliminar las diferencias de salarios y derechos entre trabajadores.
Además, Ford restablecerá el subsidio por el aumento del costo de vida y permitirá a los trabajadores declararse en huelga en caso de cierre de plantas de producción. Sin embargo, UAW busca que GM y Stellantis se tomen en serio las negociaciones y presenten una oferta seria.
Es importante destacar que esta es la primera vez en la historia que UAW declara una huelga simultánea en los tres grandes fabricantes de automóviles de Estados Unidos. El sindicato demanda aumentos salariales del 40% en los próximos cuatro años, eliminación de diferencias salariales, mayor seguridad laboral y recuperar ayudas históricas.
La huelga ha generado gran repercusión en el sector automovilístico y se espera que las negociaciones continúen en los próximos días en busca de un acuerdo que satisfaga tanto a los trabajadores como a las empresas.
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